El Reiki es una práctica terapéutica que se basa en la canalización de la Energía Vital a través de los chakras del cuerpo, según la creencia hinduista. Surgió en el siglo XIX, desarrollado por Mikao Usui, un monje budista japonés que afirmaba haber redescubierto una técnica antigua de sanación.

El enfoque del Reiki

Esta técnica implica la transmisión de energía vital a través de las manos del terapeuta hacia el receptor, ya sea uno mismo o alguien más. Se utiliza para aliviar o eliminar dolencias y enfermedades, siendo segura, eficiente y compatible con otras terapias.

Beneficios del Reiki

El Reiki aborda no solo el cuerpo físico, sino también el emocional, mental y espiritual de la persona. Ayuda a restablecer el equilibrio natural del organismo, lo que contribuye al bienestar y la felicidad. Se ha demostrado útil en una amplia gama de condiciones, desde el dolor físico hasta problemas emocionales profundos.

Aplicaciones concretas

El Reiki se emplea en diversos contextos, incluso en hospitales donde se están realizando estudios sobre su efectividad. Se ha utilizado en el manejo del dolor, cicatrización de lesiones, refuerzo del sistema inmunológico y como complemento en el tratamiento del cáncer, entre otros.

Conclusión

El Reiki no busca simplemente suprimir síntomas, sino promover un estado de equilibrio integral. Empoderando al individuo en su proceso de sanación, este enfoque holístico promueve cambios tanto internos como externos, permitiendo a las personas tomar un papel activo en su bienestar.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies